Cada vez estamos más
convencidos de la importancia de desarrollar buenos hábitos saludables y
alimenticios. Tanto es así, que hablamos de educación para la salud, incluyéndola
como proyecto dentro de los centros educativos. De forma más concreta, me
gustaría hablar de la ingesta de azúcar, un aspecto muy concreto dentro de la
educación para la salud, pero que, sin duda, resulta difícil de tratar porque a
nuestro alumnado y a nosotros mismos nos encanta tomarla.
En primer lugar,
debemos saber que la Organización Mundial de la Salud (OMS), nos habla de la
diferencia entre los azúcares libres y los azúcares intrínsecos. La OMS
considera azúcares libres a:
- los azúcares
añadidos (refinados o sin refinar) a los alimentos por los
fabricantes, los cocineros o los consumidores.
- los azúcares
presentes de forma natural en la miel, los jarabes y
zumos de fruta
Es por tanto que los
azúcares intrínsecos, que encontramos en frutas y verduras frescas, no se
incluyen dentro de las recomendaciones marcadas por la OMS, aunque si se tiene
en cuenta sus zumos o concentrados de zumo de frutas.
El análisis de datos
en las distintas investigaciones, muestran la relación que existe entre la
ingesta de azúcar y el peso corporal donde, a menor ingesta, menor peso
corporal. También, el aumento de azúcar dentro de nuestra dieta conlleva un aumento
considerable de peso (OMS, 2015). En estos datos es donde
se basará las recomendaciones de la OMS, además de los datos que evidencia el
aumento de caries cuando el consumo de azúcares libres es superior al 10%. Dada la calidad de los datos probatorios, “la
OMS califica estas recomendaciones como «firmes», es decir, pueden ser
adoptadas como políticas en la mayoría de los contextos”. (OMS, 2015, pág. 2).
Además de lo
mencionado anteriormente, la OMS nos habla de una reducción adicional del 5% en
forma de recomendación condicional, ello de acuerdo con los resultados de las
investigaciones relacionadas con el peso y la salud dental. La OMS (2015) nos
habla de recomendaciones condicionales cuando “los efectos deseables de su
cumplimiento probablemente compensan los efectos indeseables” (pág. 3), a
pesar de la dificultad de establecer las proporciones de forma precisa.
Para hacer de forma
visual la información básica respecto de la ingesta de azúcares libres en las
aulas, los docentes podemos echar mano de sinAzucar.org,
una web que nos ofrece la descarga de materiales como fotos, carteles…
En el CEIP Fuentenueva
trabajamos el desarrollo de hábitos saludables para la alimentación correcta a
través de ………………….. y, en las aulas, con el “frutómetro”. Os hablaré de ambos
proyectos en una entrada de semanario. También, cabe destacar el menú del
comedor del centro, siendo adecuado, variado y muy sano. En este enlace podemos encontrar todos los menús,
incluidos aquellos para el alumnado con alergias, intolerancias e, incluso, de religión musulmana.
Finalmente, debemos
entender que el desarrollo de hábitos saludables alimentarios está muy
relacionado con la neuroeducación, donde tener una buena alimentación va a
permitir a nuestro cerebro trabajar mejor en funciones ejecutivas, sobre todo. El
doctor Javier Blumenfeld nos ayuda a entender mejor esta relación en el
siguiente video:
REFERENCIAS DOCUMENTALES
Organización Mundial de la Salud, (2015). Nota informativa sobre la ingesta de azúcares recomendada en la directriz de la OMS para adultos y niños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario